14 Mar Sector Cárnico. Ergonomía y Medidas preventivas.
Introducción. Datos de siniestralidad. Género y Edad.
Dentro de la Industria de la alimentación en su conjunto y en las actividades que engloba (CNAE 2009) en la sección C de la industria manufacturera, 10 industria de la alimentación, tenemos el código 101 Procesado y conservación de carne y elaboración de productos cárnicos, que es el que analizaremos en materia ergonómica.
Durante 2019, el porcentaje de varones ocupados asciende a un total de 82.620 personas lo que supone un 70,5%, siendo el de mujeres de un total de 34.513 siendo en este caso de un 29,5%, pudiéndose observar que en este caso es una actividad masculinizada.
Con respecto al envejecimiento en el sector, la pirámide de edad de esta industria (datos EPA) presenta el porcentaje más alto de personas trabajadoras entre los 40 y 44 años con un 16,7% (horquilla de 4 años). La plantilla de 60 años o más sólo representarían alrededor del 6,4% de las personas ocupadas del sector. Teniendo entre 45 a 59 años un 38,16% (horquilla 14 años) y entre 20 a 39 años un 38,23 % (horquilla 19 años); por lo que, aun siendo la mayor población trabajadora entre 40 y 44 años, los mayores de 50 años suponen un 28,76 %.
Daños para la salud.
Estamos ante un sector con alta carga física (según el Inst. Ncnal. de Seguridad y Salud en el Trabajo (en adelante INSST), la define como el conjunto de requerimientos físicos a los que se ve sometida la persona a lo largo de su jornada laboral) siendo elevada en los puestos de trabajo de las áreas de producción, donde nos encontraremos con manipulación manual de cargas (levantamiento, transporte, empuje/arrastre), posturas de trabajo, trabajos repetitivos, realización de fuerzas, a los que tendremos que añadir exposiciones a vibraciones mano brazo, cuerpo entero o condiciones de bajas temperaturas, por lo que la adopción de medidas preventivas en origen tanto en el diseño del puesto, el diseño de los equipos, herramientas o útiles y la propia organización del trabajo han de ir encaminadas a evitar el peligro que supondrán las exposiciones antes enunciadas, o en su caso minimizar la exposición frente a estos riesgos y proteger a las personas trabajadoras de los posibles trastornos músculo esqueléticos (en adelante TME) que pudieran derivarse, bien como enfermedades profesionales o como accidentes de trabajo por sobreesfuerzos.
Los TME habituales se localizan en las extremidades superiores, en especial mano, muñeca, codo, brazo y hombro. Según el Real Decreto 1299/2006, de 26 de noviembre de enfermedades profesionales (en adelante EP), estas enfermedades se incluyen en el Grupo 2. Enfermedades profesionales causadas por agentes físicos, como por ejemplo (siempre teniendo en cuenta y con la debida precaución, que será la mutua de accidentes de trabajo MATEPSS, la que determinará o no, la existencia de una EP y su clasificación):
Tendinitis en el codo: epicondilitis y epitrocleitis. Tendinitis del manguito rotador en el hombro. Tendinitis mano. Síndrome de Quervain (dedo pulgar). Síndrome del canal de Guyón. Síndrome túnel carpiano.
Los accidentes por sobreesfuerzos (AS) pueden ocasionar lesiones tales como lumbalgias, pinzamientos, hernias discales, contracturas o esguinces musculares en espalda, cuello y extremidades superiores.
Además hay que tener en cuenta, que hay una evidencia de la relación causal entre los factores de trabajo físico y los TME según el INSST; factores que se dan en el sector, como son:
- Cuello y cuello / hombros, una fuerte evidencia por posturas y evidencia por repetición y fuerza.
- Hombro, evidencia por postura y repetición.
- Codo, una fuerte evidencia en caso de combinación de repetición, fuerza y postura, evidencia en caso de fuerza.
- Mano/muñeca:
- (síndrome túnel carpiano), fuerte evidencia la combinación de repetición, fuerza, postura y vibración, evidencia en repetición, fuerza y vibración.
- (tendinitis), fuerte evidencia la combinación de repetición, de repetición, fuerza, postura, evidencia en repetición, fuerza, postura.
- (síndrome vibración mano/brazo), fuerte evidencia en vibración.
- Espalda, fuerte evidencia en manipulación de cargas, vibración cuerpo completo, evidencia en postura forzada y trabajo físico pesado.
Medidas preventivas.
Todas las medidas que se indican, no se establecen de un modo exhaustivo, debiendo ser analizado de forma específica en cada empresa y puesto de trabajo, ya que dependerá de la organización del trabajo y de las condiciones del puesto, ya que pueden ser cambiantes en las diferentes empresas del sector; aunque la mayoría de ellas, serán aplicables en los puestos de trabajo.
Manejo manual de cargas
Bajo la premisa indicada el art. 3 del Real Decreto 487/97 “adoptar las medidas técnicas u organizativas necesarias para evitar la manipulación manual de cargas, en especial mediante la utilización de equipos para el manejo mecánico de las mismas, sea de forma automática o controlada por la persona trabajadora”, los medios técnicos que minimizan una manipulación manual de cargas podrían ser:
- Uso de transpaletas eléctricas.
- Sistemas de empuje mecánico en los raíles aéreos de transporte.
- Brazos de manipulación fijos o móviles.
- Sistemas por vacío.
- Volteadores mecánicos.
- Cintas automáticas de transporte.
- Mesas elevadoras.
- Sistemas sustentadores de herramienta manual y equipos eléctricos.
- Polipastos, quinales.
Otros medios que, sin llegar a evitar la manipulación, minimizan o facilitan esta, podrían ser:
- Jaulas, carros, plataformas con ruedas, diseñados con asa en altura optima de empuje (tener en cuenta en su diseño la posibilidad de diferentes alturas, para su uso por hombre y mujer), ruedas y rodamientos adecuados, con limitación de carga (menor fuerza de empuje para mujer que para hombre) y con limitación de distancia de empuje.
Posturas forzadas
En la mayor parte de los puestos se realizan tareas con adopción de posturas forzadas en espalda y extremidades superiores (hombro, codo, muñeca, mano), con aplicación de fuerza en el uso de las herramientas y útiles manuales; teniendo además bipedestación, bien estática o dinámica, por la propia exigencia de los puestos de trabajo (INSST: se considera bipedestación prolongada la postura de pie que se mantiene durante más de cuatro horas en la jornada laboral).
Las medidas preventivas podrían ser:
- Alturas de trabajo ajustables según plano de trabajo y objeto, que eviten las posturas forzadas en tronco y brazo (altura de trabajo (altura a la que se sitúan los codos y manos del trabajador) = altura de la superficie de trabajo + altura del objeto a manipular). La altura de trabajo para puestos de trabajo de pie se determina tomando como referencia la altura del codo desde el suelo, con el brazo doblado pegado al cuerpo y formando un ángulo de 90º; (teniendo en cuenta que la estatura de hombres y mujeres es diferente).
- Otra alternativa a lo anterior es determinar una altura de trabajo adecuada para personal de estatura elevada y proporcionar tarimas o plataformas adaptables en altura para el personal de estatura más baja.
- Plataformas elevadoras regulables en altura.
- Instalar desviadores, ajustable y extraíbles, de forma que se mantengan en el puesto zonas de alcance óptimas que eviten giros de tronco, flexión de tronco o de brazos, colocando todos los elementos dentro de esta zona (aquella a la que se puede acceder cómodamente con el brazo flexionado formando un ángulo de 90º, teniendo en cuenta que la distancia de los alcances será diferente para hombre y mujer).
- Instalación de tolvas y contenedores, cercanos al puesto.
- Aperturas en las mesas de trabajos (tipo tolva), dentro de la zona de alcance óptimo, para los desechos.
- Ganchos de diferentes longitudes.
- Mangos adaptados de forma que se eviten las torsiones, flexiones o desviaciones de muñeca y dichos mangos de material que evite transmisión de frio.
- Herramientas de corte ergonómicas que eviten las posturas forzadas en manos y minimicen el uso de fuerza (teniendo en cuenta que la fuerza de hombre y mujer no es la misma), con dimensiones adecuadas (tamaño de la mano hombre y mujer), bien afiladas y mantenidas.
- Equipos de sujeción de piezas que evitan el movimiento de éstas.
La posición de trabajo debe ser compatible con los requerimientos de la tarea y facilitar la movilidad de la persona trabajadora y los cambios de postura, por lo que lo ideal sería alternar la posición de pie (bipedestación estática y dinámica) y la sentada o semisentada a lo largo de la jornada de trabajo, pero en algunos casos la posición de pie es inevitable, donde la tarea exige que los desplazamientos sean continuos, por ello para la bipedestación:
- Sillas para posición sentado, semisentado.
- Material del suelo y que sea antideslizante.
- Calzado y suelas antifatiga.
- Alfombrillas antifatiga.
- Reposapiés.
Movimientos repetitivos
En este caso concreto las medidas organizativas pueden prevenir o minimizar la posibilidad de lesiones por movimientos repetitivos en extremidades superiores, con implantación de rotaciones a otras tareas de menor exigencia física o de repetitividad, donde el uso de la extremidad superior sea de forma diferenciada, uso de derecha e izquierda, disminuyendo el tiempo de exposición, duración de la tarea y determinando periodos de recuperación adecuados.
Aunque la instalación de sistemas automáticos y ayudas mecánicas, así como la eliminación o minimización de posturas forzadas y disminución de aplicación de fuerzas, también afectarán de forma positiva en que el nivel de riesgo en su caso sea menor, ya que pueden eliminar o minimizar algunos de los factores de riesgo en trabajos repetitivos, frecuencia y número de acciones técnicas, duración, recuperación, postura miembros superiores, fuerza, otros factores adicionales, frio, vibraciones, etc.; la mayoría de las medidas indicadas anteriormente, de forma directa o indirecta, impactaran en el nivel de riesgos para los movimientos repetitivos.
Medidas complementarias
Evitar la exposición a vibraciones mano brazo en el uso de equipos eléctricos manuales y vibraciones cuerpo entero en caso de uso de vehículos móviles, ya que las mismas en combinación con la exposición a los riesgos antes mencionados, pueden potenciar los TME.
Exposición a temperatura, para el personal que trabaje en cámaras frigoríficas, se distinguirán los siguientes casos (convenio colectivo industrias cárnicas):
- La jornada en cámaras de cero hasta cinco grados bajo cero será normal. Por cada tres horas de trabajo ininterrumpido, se les concederá un descanso de recuperación de diez minutos.
- En cámaras de seis grados bajo cero a dieciocho grados bajo cero, la permanencia en el interior de las mismas será de seis horas. Por cada hora de trabajo ininterrumpido en el interior de las cámaras, se le concederá un descanso de recuperación de quince minutos.
- En las cámaras de dieciocho grados bajo cero o inferiores, la permanencia en el interior de las mismas será de cuatro horas. Por cada hora de trabajo ininterrumpido en el interior de las cámaras, se le concederá un descanso de recuperación de veinte minutos.
Plan de formación en ergonomía: la formación ha de ser ajustada a los riesgos y medidas preventivas de cada puesto y el procedimiento de trabajo que se realice.
Provisión de puestos de trabajo con una menor carga física a los que temporalmente sean asignados los trabajadores que se incorporen tras haber sufrido un AS o EP, o los que sean de recién ingreso en la empresa y que permita su adaptación progresiva al nivel de esfuerzo.
Realización de ejercicios físicos de estiramiento antes y durante el trabajo para mantener el tono muscular adecuado en cada momento.